Tu pareja,
de pie contra el extremo de la cama (o incluso de la lavadora o de la
secadora), te agarra el trasero y la parte posterior de los muslos con las
manos. Rodéale la cintura con las piernas (coloca los pies sobre la cama para
apoyarte) y el cuello y los hombros con los brazos. Cuando te penetre, colgarás
suspendida de él. Rebota arriba y abajo mientras él te ayuda haciendo fuerza con los brazos.
Por qué les va a encantar:
Las que disfruten de los favores de un semental, prepárense para un encuentro realmente indecente: la mujer estará
totalmente
entregada a su merced orgásmica porque te balanceará y mecerá rodeándote con
sus brazos. Además, los rapidísimos rebotes de esta postura suponen un
movimiento totalmente nuevo: menos «mete-saca» y más acción vertical. Él
estimulará la pared frontal de tu vagina y estarás lo suficientemente cerca
como para intercambiar tórridas miradas de deseo y apasionados besos.Por qué les va a encantar:
Las que disfruten de los favores de un semental, prepárense para un encuentro realmente indecente: la mujer estará
Truco sexual
Aprieta la cadera contra su cintura, entrelaza las manos por detrás de su cuello, y luego, con cuidado, arquea la espalda para que tu región pélvica encaje firmemente con la suya. Esta licenciosa y atípica postura aumentará la sensación de placer para los dos.
*Fuente: Cosmohispano
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