¿Te molesta que tu pareja vea porno? ¿Tiene sentido consumirlo cuando nuestras
relaciones íntimas son satisfactorias? ¿Crees que es normal (dichosa palabrita) que se
distraiga o se ponga
mirando cómo se lo
hacen unos personajes de ficción o amateurs? Esta pregunta va dirigida a hombres y
mujeres, aún a sabiendas de que somos nosotras quienes solemos quejarnos por
ello. Por más vueltas que le dé, no
conozco a ningún caballero a quien le moleste que a su dama le guste ver cine
X. ¿Acaso existe? Por favor, si es así, que se manifieste.
Si te molesta/duele/defínelo tú que tu
pareja consuma porno, deberías
preguntarte por qué. ¿Es una cuestión de “principios” o pura inseguridad? ¿Acaso
crees que usar este tipo de material es de pervertidos o temes no estar a la
altura o no gustarle lo suficiente y que por eso lo necesite? En fin, ¿qué hay detrás de tu rechazo? Y,
por favor, no
interpretes sus razones. Mejor se lo preguntas e igual -lo más
lógico- afrontas la cuestión con mejor perspectiva. ¿Y si lo intentaras
compartir? Igual hasta descubres algo… que te gusta.
Y, lo siento, si eres de ideas
inamovibles y pretendes que renuncie.. puede que algún buenazo o buenaza deje de ver porno porque su amorcito se lo pida (¿se lo
imponga?), pero más bien creo que hará lo que hacen los adolescentes: verlo a
hurtadillas. ¡Con lo fácil que es acceder a ello actualmente! En fin, pedirle a alguien (¿especialmente a un hombre?)
que disfruta del porno que deje esta práctica de lado es como pedirle que deje
de pensar en sexo o de masturbarse, por poner unos ejemplos. ¿O
acaso alguien aún se cree que por vivir en pareja este tipo de aficiones desaparecen?
El porno es un divertimento como otro
cualquiera, un aliciente como otro
cualquiera para la vida sexual. Consumirlo no implica tener una mala relación
carnal o algún problema sexual. Sólo se
convierte en un problema cuando quien lo utiliza lo hace compulsivamente y eso
le impide relacionarse con otras personas de forma saludable
¿Cómo saber que es el caso? Planteándose (el usuario) una serie de preguntas:
- ¿Tu afición está dificultando tus posibilidades de convivir sexualmente en pareja o de mantener una relación sana?
- ¿Está afectando tu autoestima?
- ¿Está influyendo drásticamente en tus pensamientos sexuales, deseos y comportamientos?
- ¿Sientes que la cuestión se te ha ido de las manos, que te has vuelto dependiente, que estás compulsivamente enganchado al porno?
- ¿Cada vez lo necesitas más?
- ¿Qué consecuencias negativas te genera el uso del porno?
Si tus respuestas te hacen sospechar… pide ayuda terapéutica.
- ¿Tu afición está dificultando tus posibilidades de convivir sexualmente en pareja o de mantener una relación sana?
- ¿Está afectando tu autoestima?
- ¿Está influyendo drásticamente en tus pensamientos sexuales, deseos y comportamientos?
- ¿Sientes que la cuestión se te ha ido de las manos, que te has vuelto dependiente, que estás compulsivamente enganchado al porno?
- ¿Cada vez lo necesitas más?
- ¿Qué consecuencias negativas te genera el uso del porno?
Si tus respuestas te hacen sospechar… pide ayuda terapéutica.
Último, pero no menos importante. Para
mujeres con reparos: no todo el cine X es fuerte, cutre o eso que sea que te tira
para atrás. Visita la web de Erika Lust
y podrás ver cortos y trailers de su trabajo que te harán cambiar de opinión.
No dejes de darte un buen paseo por ella. Me apuesto algo que verás el porno
con mejores ojos… mucho mejores.
*Fuente: Sylvia de Béjar
No hay comentarios:
Publicar un comentario