Un estudio de la Universidad del País Vasco ha revelado que las personas seguras de sí mismas tienen relaciones sexuales más satisfactorias, tienen menos problemas con el deseo y saben cuidar mejor a sus compañeros que las personas inseguras
El estudio ha dividido a las personas en dos categorías básicas: seguras de sí mismas e inseguras. A su vez, las inseguras se dividen en dos grupos: las personas ansioso/ambivalentes y las evitativas.
Las personas ansioso/ambivalentes son las que se aferran al otro en una relación de dependencia, mientras que las evitativas tienden a alejarse y a rehuir los lazos afectivos y la intimidad por miedo con el pensamiento de fondo de "más vale no tener, que tener y perder".
Para realizar el estudio, los responsables de éste, liderados por Javier Gómez Zapiain, profesor de psicología de la sexualidad, estudiaron el nivel de conflicto con
el deseo erótico, el grado de satisfacción con la vida sexual y otras variables relacionadas con el comportamiento sexual, el apego y el cuidado de la pareja, en una muestra de 211 parejas estables. El 89,5% tenían pareja estable en el momento de la investigación y el tiempo medio de relación era de 13,52 años.El estudio ha dividido a las personas en dos categorías básicas: seguras de sí mismas e inseguras. A su vez, las inseguras se dividen en dos grupos: las personas ansioso/ambivalentes y las evitativas.
Las personas ansioso/ambivalentes son las que se aferran al otro en una relación de dependencia, mientras que las evitativas tienden a alejarse y a rehuir los lazos afectivos y la intimidad por miedo con el pensamiento de fondo de "más vale no tener, que tener y perder".
Para realizar el estudio, los responsables de éste, liderados por Javier Gómez Zapiain, profesor de psicología de la sexualidad, estudiaron el nivel de conflicto con
Los ansioso ambivalentes tienden a erigirse como cuidadores, según su propia percepción que no siempre coincide con las necesidades de la pareja, a no saber pedir ayuda y a reclamar atención con expresiones intensas de miedo y rabia y los evitativos a distanciarse ante los problemas, aislarse cuando están mal y a responder con más distancia, control o enfado a las necesidades de cuidado de su pareja.
Para que haya armonía, cada integrante de la pareja debe ser capaz de apoyar a la pareja cuando está mal y, a la vez, debe poder reconocer que necesita apoyo cuando está angustiado o tiene problemas. Una persona psicológicamente saludable es lo suficientemente flexible como para cambiar de una posición a otra cuando las circunstancias lo requieren.
Las personas seguras de sí mismas pueden hacer este salto mental cuando es preciso, pero las ansioso/ambivalentes o las evitativas no son capaces de cambiar su rol ;)
*Fuente: Lamaletaroja.com
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